Maltratada y despreciada

Estos dias, como habéis visto, me he estado refugiado en el bosque con un lobezno, pero hoy, esta mañana, Anheru me ha encontrado y con una correa electrificada me ha traído a tirones hasta el antro que antes era mi hogar, ha cogido al lobezno y lo trajo también consigo.

Tras llegar a casa, me ató con grilletes que hizo a la pared y mato y despedazó al lobezno delante de mis ojos. Jamás pensé que haría eso, jamás pensé que Anheru mataría a un ser:

-TE DUELE?!

-PORQUE LO HAS HECHO?!!! MAMÓN!!! CABRÓN!!!! HIJO DE PERRAAAAA!!!!!

-ASÍ ES COMO ME SIENTO CUANDO MATAS A GENTE PUDIENDO SALVARLA!!!

En ese momento, tenía en sus manos la cabeza de la pobre criatura, intenté escapar, pero lo único que conseguí fue dislocarme tobillos y muñecas, y provocarme unas grandes heridas, era hora de decir todo lo que pensaba:

-SABES PORQUE ME HE ESCAPADO?! tu!!! me tratas como un  animal por quitarle el dolor con la muerte a otra gente!! cada poco encuentro fotos de humanas y furry que no son mías!!!! me desprecias!! me evitas a mi y a Sadik!!! me acomplejas!!! que mas quieres!?!!! eh?!!!

En ese momento, Anheru se calló, se acercó a mi, con lágrimas en los ojos, acarició mi cara, pensando que se disculparía:

-Tienes mucho que aprender- Acto seguido, me arreo un bofetón, despues, un rodillazo en el estomago que me hizo escupir sangre, y unos cuantos puñetazos  para terminar:

-Matame! matame ya!!!! déjame ir con Amadeus!!!-Anheru esbozo una sonrisa

-Amadeus? el lobato? JAJAJAJA!!!! prefiero hacerte sufrir, asesina...

Seguido se fue, dejándome atada y con el cadáver despedazado de Amadeus delante de mis narices

descansa en paz pequeño....

Aullidos al sol

Me desperté, gracias a que al pequeño cachorro se ha puesto a jugar con mi oreja y a morderla, le intenté coger con cuidado, pero escapó corriendo hasta mis pies, y ahí  movía el rabo y daba pequeños ladridos, indicando que quería jugar, sonreí:
-Cuanto tiempo llevas despierto eh? retaco!- reí. Agarré al pequeño,pude observar que ya estaba curado, le saque la "venda" y vi que casi esa herida estaba cerrada, tal vez me equivoqué al pensar que era profunda, me alegró poder verle correr a mi alrededor mientras me trenzaba el pelo y me disponía a andar, era hora de buscar comida.
Mientras andaba en busca de algo que darle de comer al pequeño, este corría entre mis piernas, casi me hace tropezar un buen par de veces.
Miré a uno de los arboles, y pude ver un nido:
-Espera aquí, voy a por el desayuno- Empecé a escalar el árbol y le eché mano a los huevos, los miré y parecían enormes.
-Estos son huevos y no los que compraba el gilipollas de Anheru!- Tras decir esa frase, me pareció ver que no me importaba nada lo ocurrido con Anheru, sonreí al verme capaz de mencionar ese maldito nombre y no llorar.
Bajé, y el pequeño estaba ansioso por verme, le acaricié.
Rompí un par de huevos en mi mano y se los di al cachorro, los embriones estaban a medio hacer, por un momento me dio pena, pero eran esos pájaros o nosotros.
Los otros dos que quedaban me los comí yo, apenas me llenaron pero me dieron algo de fuerza hasta el mediodía.
A dicha hora, me puse a hacer las curas al pequeño, y después nos pusimos a juguetear como tontos, pero por el fondo del bosque oía una voz familiar:
-Hawky?!! estas ahi?!!
-Mierda!!!- Era Anheru, venía en mi busca, seguramente me buscaría por todos los sitios, y este es el último que miraría. Agarré al lobezno y escalé un árbol, mirando por donde iba. Se paró a mirar las viejas "vendas" llenas de sangre y agua del cachorro, y los huevos rotos que comimos crudos en la mañana, Anheru murmuró:
-Tiene que estar herida...maldita sea...Hawky!!!!-Salió corriendo, y esperé un rato a que se fuera.
Bajé del árbol y el pobre lobato me miraba con cara triste, sollozando, como si subiera lo que pasaba, le abrazé y salimos corriendo en dirección contraria por donde se fue Anheru.
Después de ese indeseado encuentro, me puse a pescar un par de truchas. Las cociné y las comimos entre el pequeño y yo. La noche parecía ponerse enseguida y monte un refugio  y una pequeña hoguera como hice la otra vez.
Esta vez el lobato no se adormeció rápido, se puso a aullar al atardecer, como si se despidiera del sol, contemple esa hermosa escena mientras duró.
Ahora, al parecer tenía un nuevo hogar, y se puede decir, que este pequeño me ha salvado la vida, al igual que lo hice yo con él.

Aquí tenéis al pequeño cachorro en cuestión,
esta foto fue sacada un poco antes de coger el desayuno.

Perfecta Inperfección

Tras adentrarme, conseguí adaptarme a la oscuridad opaca del bosque, agudicé mis oídos, y me preparé mis garras para cualquier ataque, pero...para que intentar sobrevivir aquí...si yo vine a morir, a acabar con esta vida que al final resultó ser peor que cualquier otra, suspiré, sabía que mi "estancia" en este sitio no duraría mucho, estaba deseando que una alimaña me comiera, que no dejara restos de mi ser y que nunca me encontraran, así que seguí adentrándome, cada vez veía menos, mis pupilas no podían dilatarse mas, escuché aullidos de lobo, graznidos de búhos y cuervos, y por el fondo, un pequeño regato, sin saber como, me sentía con necesidad de beber agua, por instinto llegué al pequeño regato y me puse a beber.
Tras saciar mi sed, me levante, y enfrente mía, al otro lado del regato, vi un pequeño lobezno,parecía herido, me acerqué a ver como se encontraba. Sangraba por la pata trasera, la herida parecía bastante profunda, y si lo dejaba ahí no tardaría mucho en conseguir lo que yo quería, morir.
Desinfecté la herida lamiéndola, el pequeño cachorro no paraba de gruñir, pero prefería que se enfadara conmigo y salvarlo, a dejarle morir.
Me quité la camisa y la rompí de manera para hacerle una venda, lo llevé en brazos,hice un refugio y encendí una pequeña hoguera, me tumbé y lo abrazé con cuidado para no hacerle daño y darle calor, no tardó en quedarse dormido,me paré a pensar "genial, vengo aquí a suicidarme y viene un puto lobezno a darme la tabarra" seguido suspiré y me quedé dormida.

Lagrimas de sangre, heridas de cristal

Tras acabar los partidos, en los cuales Sadik ganó, y tras la entrega de notas, tiempo después Anheru empezó a cambiar radicalmente, no me refiero físicamente, sin más, empezó a insultarme, a golpearme, y a llamarme asesina ya que me alimento de carne de moribundos que sin remedio me piden la muerte.
Hasta hace poco, me encerró en la terraza, atada con una correa y dándome carne en descomposición como único alimento.
Conseguí salir, y atacarle, le dejé ciego del ojo derecho, conseguí escapar de casa,lo único que pude oír de el es:
-Zorra!!! conseguiré matarte a ti y a tus subformas!!! asesina!! te terminaré!! haré el trabajo que Hitler no hizo!!
Tras escuchar esas palabras, y tras preguntarme porque estaba así conmigo, sabiendo mi propósito con la gente y animales a medio morir, porque me trata como un monstruo, porque quiere completarme víricamente para ser Perfect Assault, porque quiere terminar lo que más odia, y porqué me odia a mi! Rompí a llorar en cuanto me quede sin aliento, llegué a parar a un bosque, tenía el estomago destrozado por la carne en putrefacción, y el cuello lleno de heridas por la correa.
Me adentré más al frondoso lugar, ya se hacía de noche, y el lugar era perfecto para alguien como yo, un lugar oscuro alejado de la mano de Dios. Ideal para un ser sin hogar, que lo ha perdido todo en un arrebato de locura, y sin nada ni nadie en quien confiar, la muerte me esperaba allí dentro...

Deseadme suerte para encontrar una muerte sin dolor, ya no quiero sufrir más